TIPOLOGÍA SUBLIMADA

Desde el punto de vista de la psicología del vestido las personas correspondientes a la tipología sublimada son las que más satisfacción obtienen con la ropa.

Generalmente esta satisfacción va unida también a un sentimiento de carácter narcisista que deriva en una total fusión de la ropa y el cuerpo constituyendo de ese modo la unidad armónica deseada para proyectar una imagen de belleza y elegancia.

Hablamos de personas de las que decimos a menudo que ponga lo que se ponga siempre va bien.

Si a todo ello se une además una capacidad estética desarrollada, podemos concluir entonces que es en esta tipología donde podemos buscar el desarrollo más satisfactorio del vestido.

La capacidad estética se refiere por ejemplo al conocimiento de prendas que se ajustan a la morfología o la combinación de colores, estilos y texturas adecuados.

Es por ello que la orientación en moda útil en este caso tiene que ir encaminada al asesoramiento de imagen centrado en la morfología.